César "el Mono" Altamirano Alcázar (Callao, 20 de mayo de 1944-Lima, 9 de agosto de 1993) fue un cantante peruano de baladas y nueva ola, quien tuvo mucha popularidad y formó parte del movimiento juvenil de la nueva ola en Perú en la década de 1960 participando en películas y grabando exitosos temas.
Nació en el Callao, el 20 de mayo de 1944. Su padre fue César Augusto Altamirano Schwartz, director de la orquesta César Augusto y sus Locos del Mambo en la década de 1940 y de Consuelo Alcázar Alfaro, fue el mayor de cuatro hermanos, hermana Isabel, Angélica y hermano menor con el mismo nombre César.
Desde muy niño solía cantar la canción Monalisa, con lo cual luego se ganaría el apodo de El Mono Altamirano. Estudió en el Colegio George Washington y terminó su secundaria en el Colegio Militar Leoncio Prado, integró la orquesta del Colegio Militar. Su tío Fernando Alcázar, un reconocido pianista chalaco lo lleva a un sello disquero a suplir a un cantante y es así como en 1961 graba las canciones «Rosa» y «15 años tiene mi amor». Ingresa a la Universidad Nacional de Ingeniería, pero posteriormente participa en el concurso Cancionísima.
En enero de 1964 empieza su carrera en Panamericana Televisión, ganó el Primer festival Internacional de la Nueva Ola con el tema «Corazón». En 1967 participó en la película Mi secretaria está loca, loca, loca junto a Violeta Rivas, Ricardo Blume entre otros. En septiembre de 1968, participa en el Festival de la canción de Trujillo con la canción «Juego de Amor». Se casó con la actriz Cuchita Salazar Repetto con quien tuvo dos hijos: Sandro César y Diego César.
En 1974 participó en el Festival OTI con el tema «Mujer primera». Luego de su divorcio con Cuchita Salazar prepara un nuevo disco donde destacan temas como «Silencio» y «Voy a perder la cabeza por tu amor»". Luego conoce a María del Pilar Portocarrero Zanetti, con quien tuvo dos hijos: Carlo César y María del Pilar. Falleció el 9 de agosto de 1993 producto de un infarto. Fue declarado Hijo Predilecto del Callao y una calle lleva su nombre.
REPOSICION
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Este disco ha sido ripeado por nuestro amigo C. Sotomayor
María Regina Alcóver Ureta nació en la ciudad de Lima el 29 de setiembre de 1948, hija de la actriz peruana Marianela Ureta y del cantante brasileiro Ray Alcóver.
Con sólo 8 años de edad comenzó a hacer teatro en Radio Nacional del Perú y tres años más tarde, obtuvo un contrato por la cadena de televisión Panamericana.
Llegada la década de los sesenta fue cantante de la Nueva Ola y participó al lado de otros cantantes peruanos como Pepe Cipolla, Anita Martinez, y Joe Danova, con quien se casaría tiempo después.
Contrajo nupcias con Joe Danova en 1967, con quien tuvo a su primer hijo, el reconocido cantante y compositor peruano Gianmarco.
Para 1980 fue la representante del Perú en el 9no Festival OTI de la canción Iberoamericana realizada en Buenos Aires. Posteriormente, Regina fue reportera de la cadena Telemundo en Miami, y realizó más de 80 reportajes en el programa llamado “Día a día”.
Ha sido jurado del programa concurso “Desafío y fama” y desde 2008 es la conductora del programa Gracias a la Música en una emisora limeña.
Este disco ha sido ripeado por nuestro amigo C. Sotomayor
Uno de los triunfos más rotundos de Marifé de Triana, fue La loba. Y a partir de ahí, de manera oficiosa, muchos la conocieron así, por ese sobrenombre que le ajustaba muy bien a su manera de atacar la copla llena de teatralidad, con una puesta en escena dramática, casi performántica, como diríamos hoy desde el arte contemporáneo que, precisamente estos días, puede verse en Arco..
Marifé, ya lo sabemos, fue bautizada María Felisa Martínez López en 1936, en Burguilos (Sevilla), aunque muy pronto se trasladó con su familia al barrio de Triana, de ahí su nombre artístico, donde pasó sus primeros años de vida, aunque, al enviudar su madre, se trasladaron a Madrid, donde inició muy joven su carrera como cantante.
Demostrando que no todo en la copla o el flamenco viene del sur de Despeñaperros (doña Concha Piquer era valenciana, y Miguel Poveda o Mayte Martín son catalanes). Debutó en RNE de la mano de David Cubedo, que fue el inspirador de su nombre como artista.
Antes de fundar Los Van Van, el 4 de diciembre de 1969, incursionó como contrabajista, desde la Orquesta del Instituto Cubano de Radio y Televisión hasta varios grupos de son y jazz. Su paso por la Orquesta Revé marcó un momento decisivo en la búsqueda del estilo que quería alcanzar; puso a prueba su espíritu renovador brindando a la misma algunas soluciones sonoras y de formato.
Formell incorporó el bajo, la organeta, la guitarra eléctrica, los violines y sustituyó la flauta de cinco por la de sistema. El trabajo vocal se sustituyó por el montaje de voces propio de los cuartetos. Esta experimentación sirvió de punto de partida para que, una vez creado Los Van Van, su contagioso ritmo sentara pautas en la música popular bailable.
María del Carmen García Galisteo, conocida artísticamente como Carmen Sevilla, nació el 16 de octubre de 1930 en Sevilla (Andalucía) y falleció en Madrid a los 92 años de edad el día 27 de junio de 2023. Cantante folclórica de la canción española, bailaora y actriz.
María del Carmen García Galisteo, conocida artísticamente como Carmen Sevilla, nació el 16 de octubre de 1930 en Sevilla (Andalucía) y falleció en Madrid a los 92 años de edad el día 27 de junio de 2023. Cantante folclórica de la canción española, bailaora y actriz.
María del Carmen García Galisteo, conocida artísticamente como Carmen Sevilla, nació el 16 de octubre de 1930 en Sevilla (Andalucía) y falleció en Madrid a los 92 años de edad el día 27 de junio de 2023. Cantante folclórica de la canción española, bailaora y actriz.
Nieta de un periodista, ha sido una de las folclóricas más internacionales de nuestro país. Destacó desde muy niña por sus notables dotes para el cante, el baile y la interpretación. Así, a los doce años, debuta profesionalmente como bailaora con la compañía de Estrellita Castro en "Rapsodia española", espectáculo en el que comparte escenario con Paquita Rico y Ana Esmeralda. Muy joven aún formará parte también de las compañías del Príncipe Gitano, el Marqués de Montemar y de Paco Reyes.
Apenas con dieciséis años aparece en el cortometraje documental "Hombres ibéricos" (D. Viladomat, 1946), su debut en el mundo del cine. La que sería bautizada en los cincuenta como “Novia de España”, cuando ya era conocida como Carmen Sevilla. Como hija del letrista de canciones Antonio García Padilla (Kola), no tardó en desarrollar sus dotes para el cante y el baile.
En 1948 protagoniza, junto a Jorge Negrete, "Jalisco canta en Sevilla". Su simpatía y su belleza le hacen triunfar rápidamente. Vendrán así, "La guitarra de Gardel" (1949), "Filigrana" (1948), "Cuentos de la Alambra" (1950), "La Revoltosa" (1950) y "El sueño de Andalucía" (1950), al lado del cantante Luis Mariano, junto al que se la vuelve a ver en "Violetas imperiales" (1952). "La pícara molinera" (1954), "Congreso en Sevilla" (1955) y "La fierecilla domada" (1955) son sus siguientes logros, a partir de los cuales comenzaría su andadura internacional por los paisajes franceses, junto a Fernandel, con el que rueda "El amor de Don Juan" (1956). Poco a poco, la folclórica consigue ser una de las estrellas más populares del cine español en los años cincuenta. Con el tiempo, fue abandonando el mundo del canto y el baile en sus películas e intentó convertirse en actriz dramática.
Así protagonizaba la primera cinta española candidata a un Oscar como Mejor Película de habla no inglesa con "La Venganza" (1957), de Juan Antonio Bardem. Dentro de sus actuaciones internacionales llegó a encarnar personajes dramáticos en "Pan, amor y… Andalucía" (1958) o "Rey de Reyes" (1960).
Ese mismo año contraía matrimonio con el que fuera su primer marido, el compositor y director de orquesta Augusto Algueró, junto al que tuvo un hijo, Augusto Algueró Junior. También en 1960 recibía la Cruz de Artes, Ciencias y Letras de España, como premio a su ya dilatada carrera artística, un trofeo más para la folklórica que continuaba ocupando un lugar privilegiado en las preferencias del público español y latinoamericano.
Después vendrán otros como las dos medallas del Círculo de Escritores Cinematográficos (CEC) a la mejor actriz, la Medalla de Andalucía o la Medalla de Honor del CEC, esta vez como reconocimiento a su trayectoria profesional. Con "El secreto de Mónica" (1961), de José María Forqué, la actriz llevó a cabo una labor más interesante que, sin embargo, le restó popularidad, lo que le hizo que volviera a interpretar películas de corte popular como "El balcón de la Luna" (1962), junto a Paquita Rico y Lola Flores, "Crucero de verano" (1963), "La guerrillera de Villa" (1967), "El relicario" (1969) y "Un adulterio decente" (1969).
Primero con "Enseñar a un sinvergüenza" (1970) y después con "El techo de cristal" intenta de nuevo continuar la carrera dramática que se consolida con otros títulos como "Nadie oyó gritar" (1972), "La cera virgen" (1971), "La loba y la paloma" y "La promesa", hasta que en 1978 decide retirarse del cine. Carmen Sevilla sobrevivía a todas sus contemporáneas, como Sara Montiel, Paquita Rico o Marujita Díaz, y a su tiempo.
El mito del arte y del folclore andaluz abandona el mundo del espectáculo y decide seguir a su siguiente marido, el empresario Vicente Patuel. Pero al final, Carmen volvió a la escena, aunque a la pequeña pantalla. Y lo hizo en los 90, cuando Lazarov le da la oportunidad de retornar de su retiro con el Telecupón de Tele 5. Cuando a la sevillana se le empieza a quedar corto el espacio que le dedicaban al programa, media hora los viernes, se incorpora al equipo de TVE para sustituir a José Manuel Parada en "Cine de Barrio", donde continúa divirtiendo a los espectadores con el buen humor que le caracteriza.
En 2010, dejó el programa siendo sustituida por la actriz Concha Velasco, desapareciendo de la vida pública. En abril de 2012, se informó de que, al igual que su madre, padecía la enfermedad de Alzheimer. En 2015 se hizo público que la enfermedad había avanzado al punto de que ya no era capaz de reconocer a nadie, ni siquiera a su propio hijo, que se convirtió en su administrador y cuidador principal al trasladarse a vivir con ella.
En marzo de ese mismo año Carmen fue ingresada en la residencia "Sanyres" (Aravaca), dejando así su casa para ponerse al cargo de profesionales que la cuidan y miman desde entonces.
En 2016, el programa "El Legado" emitido por Canal Sur TV, dedicó una de sus emisiones a la artista. Moncho Ferrer, íntimo amigo de la artista desde hace más de cuarenta años, declaró en el programa que Carmen se encuentra muy estable a pesar de su enfermedad, siendo él junto a su hijo, las dos únicas personas que la pueden visitar, fruto del deseo de su hijo Augusto de que su madre sea recordada siempre como una gran estrella. Su biografía, "Carmen Sevilla, memorias", fue publicada en 2005 por el periodista
María del Carmen García Galisteo, conocida artísticamente como Carmen Sevilla, nació el 16 de octubre de 1930 en Sevilla (Andalucía) y falleció en Madrid a los 92 años de edad el día 27 de junio de 2023. Cantante folclórica de la canción española, bailaora y actriz.
Nieta de un periodista, ha sido una de las folclóricas más internacionales de nuestro país. Destacó desde muy niña por sus notables dotes para el cante, el baile y la interpretación. Así, a los doce años, debuta profesionalmente como bailaora con la compañía de Estrellita Castro en "Rapsodia española", espectáculo en el que comparte escenario con Paquita Rico y Ana Esmeralda. Muy joven aún formará parte también de las compañías del Príncipe Gitano, el Marqués de Montemar y de Paco Reyes.
Apenas con dieciséis años aparece en el cortometraje documental "Hombres ibéricos" (D. Viladomat, 1946), su debut en el mundo del cine. La que sería bautizada en los cincuenta como “Novia de España”, cuando ya era conocida como Carmen Sevilla. Como hija del letrista de canciones Antonio García Padilla (Kola), no tardó en desarrollar sus dotes para el cante y el baile.
En 1948 protagoniza, junto a Jorge Negrete, "Jalisco canta en Sevilla". Su simpatía y su belleza le hacen triunfar rápidamente. Vendrán así, "La guitarra de Gardel" (1949), "Filigrana" (1948), "Cuentos de la Alambra" (1950), "La Revoltosa" (1950) y "El sueño de Andalucía" (1950), al lado del cantante Luis Mariano, junto al que se la vuelve a ver en "Violetas imperiales" (1952). "La pícara molinera" (1954), "Congreso en Sevilla" (1955) y "La fierecilla domada" (1955) son sus siguientes logros, a partir de los cuales comenzaría su andadura internacional por los paisajes franceses, junto a Fernandel, con el que rueda "El amor de Don Juan" (1956). Poco a poco, la folclórica consigue ser una de las estrellas más populares del cine español en los años cincuenta. Con el tiempo, fue abandonando el mundo del canto y el baile en sus películas e intentó convertirse en actriz dramática.
Así protagonizaba la primera cinta española candidata a un Oscar como Mejor Película de habla no inglesa con "La Venganza" (1957), de Juan Antonio Bardem. Dentro de sus actuaciones internacionales llegó a encarnar personajes dramáticos en "Pan, amor y… Andalucía" (1958) o "Rey de Reyes" (1960).
Ese mismo año contraía matrimonio con el que fuera su primer marido, el compositor y director de orquesta Augusto Algueró, junto al que tuvo un hijo, Augusto Algueró Junior. También en 1960 recibía la Cruz de Artes, Ciencias y Letras de España, como premio a su ya dilatada carrera artística, un trofeo más para la folklórica que continuaba ocupando un lugar privilegiado en las preferencias del público español y latinoamericano.
Después vendrán otros como las dos medallas del Círculo de Escritores Cinematográficos (CEC) a la mejor actriz, la Medalla de Andalucía o la Medalla de Honor del CEC, esta vez como reconocimiento a su trayectoria profesional. Con "El secreto de Mónica" (1961), de José María Forqué, la actriz llevó a cabo una labor más interesante que, sin embargo, le restó popularidad, lo que le hizo que volviera a interpretar películas de corte popular como "El balcón de la Luna" (1962), junto a Paquita Rico y Lola Flores, "Crucero de verano" (1963), "La guerrillera de Villa" (1967), "El relicario" (1969) y "Un adulterio decente" (1969).
Primero con "Enseñar a un sinvergüenza" (1970) y después con "El techo de cristal" intenta de nuevo continuar la carrera dramática que se consolida con otros títulos como "Nadie oyó gritar" (1972), "La cera virgen" (1971), "La loba y la paloma" y "La promesa", hasta que en 1978 decide retirarse del cine. Carmen Sevilla sobrevivía a todas sus contemporáneas, como Sara Montiel, Paquita Rico o Marujita Díaz, y a su tiempo.
El mito del arte y del folclore andaluz abandona el mundo del espectáculo y decide seguir a su siguiente marido, el empresario Vicente Patuel. Pero al final, Carmen volvió a la escena, aunque a la pequeña pantalla. Y lo hizo en los 90, cuando Lazarov le da la oportunidad de retornar de su retiro con el Telecupón de Tele 5. Cuando a la sevillana se le empieza a quedar corto el espacio que le dedicaban al programa, media hora los viernes, se incorpora al equipo de TVE para sustituir a José Manuel Parada en "Cine de Barrio", donde continúa divirtiendo a los espectadores con el buen humor que le caracteriza.
En 2010, dejó el programa siendo sustituida por la actriz Concha Velasco, desapareciendo de la vida pública. En abril de 2012, se informó de que, al igual que su madre, padecía la enfermedad de Alzheimer. En 2015 se hizo público que la enfermedad había avanzado al punto de que ya no era capaz de reconocer a nadie, ni siquiera a su propio hijo, que se convirtió en su administrador y cuidador principal al trasladarse a vivir con ella.
En marzo de ese mismo año Carmen fue ingresada en la residencia "Sanyres" (Aravaca), dejando así su casa para ponerse al cargo de profesionales que la cuidan y miman desde entonces.
En 2016, el programa "El Legado" emitido por Canal Sur TV, dedicó una de sus emisiones a la artista. Moncho Ferrer, íntimo amigo de la artista desde hace más de cuarenta años, declaró en el programa que Carmen se encuentra muy estable a pesar de su enfermedad, siendo él junto a su hijo, las dos únicas personas que la pueden visitar, fruto del deseo de su hijo Augusto de que su madre sea recordada siempre como una gran estrella. Su biografía, "Carmen Sevilla, memorias", fue publicada en 2005 por el periodista
Continuados fue un quinteto que creció hasta sexteto y se estabilizó como trío, cuando ese tipo de formaciones, voz femenina y complementos masculinos, dominó el panorama pop más comercial. Años de Los Mismos, Los 3 Sudamericanos, Los 3 de Castilla o Machucambos, por no extendernos más.
Su voz femenina aparecía como Mónica, pero una vez disuelto el grupo siguió carrera con su nombre real, Manuela, con el que grabó trece títulos que son los que cierran este doble CD.
Era un grupo de Barcelona, maestros en eso de hacer adaptaciones al español de cuanto éxito surgía por el mundo.
Así tienen en su repertorio temas como “El león duerme esta noche” de los Tokens o “Alone again, naturally” de Gilbert O’Sullivan y el famoso “Hiriéndonos mutuamente” de los hermanos Carpenters.
Cuando Manuela emergió como solista siguió basando sus discos en éxitos ajenos, pero quizás buscando temas menos comerciales y más sensibles.
Como las bossanovas “Insensatez” o “Canto de Ossanha”, boleros como “El reloj” o “Sombras” y hasta alguna incursión en el sonido disco como aquel “I love to love” de Tina Charles. Espejo de un época en que los grupos aprendían de lo que triunfaba fuera y nos lo ofrecían a los oyentes españoles.
Presenta diferentes espectáculos, como "Mantilla y Peina", "Feria de cantares" o "Así canta España". Apartada de los escenarios durante algunos años para cuidar de su familia, regresa en 1985, manteniéndose en activo hasta la actualidad.
A lo largo de su dilatada carrera artística, ha grabado numerosos discos y compartido escenario con importantes figuras de la canción, como Antonio Machín, Juanito Valderrama, Caracolillo, María Porcel, Imperio Argentina, Ana del Río, Marifé de Triana o Juanita Reina, entre otros.
En los años noventa, y aprovechando un cierto resurgir de la copla, mantiene su popularidad a nivel nacional, en parte gracias a la televisión, en la que interviene con frecuencia. En esa época participa en diferentes ciclos musicales, entre los cuales destaca "Sevilla y la Copla" en el teatro Lope de Vega de la capital andaluza en 1993.
Tras el verano de 1983aparece su tercer disco, “Un día mas” (Polydor, 1983), considerado por parte de los aficionados como el mejor, quizás al mismo nivel del anterior para los otros. Las baladas que incluye este trabajo son de gran emotividad –“Perdí mi oportunidad” o “Solo amor”– pero hay también lugar a temas rápidos y desenfadados como “Todo está bien” o “Un loco en el avión”.
Lo primero que llama poderosamente la atención es que cada miembro del grupo firma y canta sus temas, rompiendo la tradición de firmar conjuntamente (salvo “Solo amor”, que es de Daniel y lo canta Guzmán). El disco se graba en Eurosonic, con un equipo de producción similar en el que Juan Vinader dirige con José Antonio Álvarez Alija.
La cubierta del álbum, a cargo de Guillermo Duarte, es la más bella de todas las de Cadillac. Hay colaboraciones de Javier de Juan (su primer bateria), Juan Robles Cánovas (de CRAG), Manolo Toro, y especialmente de Pepe Marchante. De hecho, durante la grabación del álbum se consideró convertir Cadillac en un quinteto con Pepe, ya que este ya también era músico de directo, pero finalmente la idea se desechó.
Hay experimentos con instrumentos sintetizados (las baterías de “La hora del lobo” o “Todo está muy bien”) y algo de programaciones -estamos en los 80-, pero el disco suena aún muy orgánico y natural (especialmente en voces y guitarras). Sin embargo, si que hay indicios que muestran elementos de la futura evolución del grupo.
Entre los tan solo ocho temas, si bien algo más largos de lo habitual respecto a los dos anteriores discos, no encontramos la regularidad ni de sonido ni de calidad del anterior, pero en la comparación inevitable con “Llegas de Madrugada” (Polydor, 1982), podemos decir en beneficio del actual que tampoco el otro tenía temas como “Perdí mi oportunidad”.
En este disco hay de todo, pero destacan las baladas y los medios tiempos, aparte de la ya citada, una de las más bellas composiciones de Guzmán inicialmente planteada para Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán en su fallida reunión de 1978, “Solo amor” de Daniel y Guzmán no se queda atrás y es de una enorme belleza, como tampoco la balada de Agustín “Un día mas”.
“Un loco en el avión” y “Todo está bien” proporcionan, como dijimos antes, momentos divertidos para bailar y “Tengo ganas”, nos muestra la voz solista de Eduardo en un tema pop que podría haber estado en el segundo álbum.
Es este, en definitiva un buen disco, muy recomendable también, que también gozó del apoyo de los seguidores, con unas ventas aceptables, aunque algo inferiores a las del anterior.